Así se las gastan en el Amazonas, esto lo he sacado de un foro en el que comentan la pelicula "ciempiés humano"
Primero se ata al sujeto a un poste, pero en lugar de dar la espalda al mismo, al revés, con el culo en pompa al exterior, desnudo, claro.
Se van a un hormiguero de la selva y pillan un buen puñao de hormigas gigantes amazónicas. Las machacan en un bol logrando una interesante pasta a tope de ácido fórmico.
Te meten la pasta por el ojete, hasta saturarte el cólon e inmediaciones. De entrada el ácido fórmico en contacto con la mucosa intestinal empieza a hacer estragos y el dolor se hace insoportable.
Finalmente se retiran y esperan a que aparezca un oso hormiguero. Éste, atraido por el olor a hormiga de tu culo, se acercará y empezará a husmear. Como huele a hormiga pero no ve ninguna, hará lo que sabe hacer mejor: sacar la lengua.
La lengua del oso hormiguero, de 50 cm o más de largo, penetra en tus intestinos cual hormiguero, y comienza a hurgar en busca de alimento, desgarrando todo lo que pilla a su paso como si fuera mantequilla.
Como el pobre no encuentra nada, pasa al siguiente método, muy efectivo para hormigueros situados en troncos de árboles: se pone a dos patas y comienza a despedazar la corteza con sus garras afiladas como cuchillas.
Ah espera!. ¡Que la corteza ahora resulta ser tu piel que está siendo arrancada a tiras!
Al final el oso abandona su objetivo sin encontrar alimento, dejando atrás una pulpa sanguinolenta atada a un palo.
Los nativos, tan simpáticos ellos, se acercan, y si te ven todavía con vida, proceden a rematar la faena desatándote y soltándote en el río más cercano, donde las pirañas terminarán de desgarrar el músculo y la piel que te quede.
Se van a un hormiguero de la selva y pillan un buen puñao de hormigas gigantes amazónicas. Las machacan en un bol logrando una interesante pasta a tope de ácido fórmico.
Te meten la pasta por el ojete, hasta saturarte el cólon e inmediaciones. De entrada el ácido fórmico en contacto con la mucosa intestinal empieza a hacer estragos y el dolor se hace insoportable.
Finalmente se retiran y esperan a que aparezca un oso hormiguero. Éste, atraido por el olor a hormiga de tu culo, se acercará y empezará a husmear. Como huele a hormiga pero no ve ninguna, hará lo que sabe hacer mejor: sacar la lengua.
La lengua del oso hormiguero, de 50 cm o más de largo, penetra en tus intestinos cual hormiguero, y comienza a hurgar en busca de alimento, desgarrando todo lo que pilla a su paso como si fuera mantequilla.
Como el pobre no encuentra nada, pasa al siguiente método, muy efectivo para hormigueros situados en troncos de árboles: se pone a dos patas y comienza a despedazar la corteza con sus garras afiladas como cuchillas.
Ah espera!. ¡Que la corteza ahora resulta ser tu piel que está siendo arrancada a tiras!
Al final el oso abandona su objetivo sin encontrar alimento, dejando atrás una pulpa sanguinolenta atada a un palo.
Los nativos, tan simpáticos ellos, se acercan, y si te ven todavía con vida, proceden a rematar la faena desatándote y soltándote en el río más cercano, donde las pirañas terminarán de desgarrar el músculo y la piel que te quede.
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